Contenido

El dinero no crece en los árboles, las decisiones sí

contenido Cuando te enfrentas a una situación, ¿quisieras saber de antemano qué decisión sería la más conveniente para ti?

Todos los días tomamos decisiones: qué ropa vestiremos, qué comeremos o qué haremos durante esa jornada, son ejemplos de ellas. Generalmente, eso lo hacemos con facilidad; sin embargo, hay otras decisiones que son más complejas y nos cuestan más trabajo.

Hay distintas herramientas o métodos que podemos usar para decidir con mayor asertividad. Una de ellas son los árboles de decisión, que son esquemas que nos permiten representar gráficamente resultados posibles de una elección.

Ésta es también una herramienta utilizada en las empresas para comprar acciones según los costos, probabilidades y beneficios que traerán. Lo anterior puede servir a los involucrados simplemente para intercambiar ideas entre ellos o, incluso, para hacer un algoritmo que anticipe matemáticamente la mejor opción. Los alcances del uso de árboles de decisión pueden ser simples o complejos, por lo que también puedes usar esta herramienta con tus estudiantes para promover que desarrollen el pensamiento computacional.

Para hacer un árbol de decisión con tus alumnos sigue estos pasos:

  1. Identificar un conflicto
  2. Definir el problema (las razones por las que esto ocurre)
  3. Pensar en posibles soluciones

Captura de pantalla 2019-01-29 a la(s) 10.03.56.png

También puedes plantear a tus estudiantes distintas situaciones que estén relacionadas con temas de su interés y que los lleven a reflexionar sobre las decisiones que toman al respecto, como casos de bullying o sobre los derechos de los niños y los adolescentes. ¡Anímate a usar los árboles de decisión en el aula!


Imagen destacada obtenida de: https://www.freepik.es/foto-gratis/chica-teniendo-una-pregunta_2262595.htm